En la arquitectura actual es notorio el uso generalizado
del vidrio. Casas y oficinas, inundadas de luz, juegan un importante papel en
nuestra calidad de vida. Sin embargo, el alto grado de transparencia del
vidrio no se ve acompañado del necesario de aislamiento exigido en la
actualidad.
Los vidrios de capa de baja emisividad se fundamentan en la
reducción de la emisividad de la superficie del vidrio en un doble
acristalamiento por medio de capas con contenido de plata, que es el que tiene
menos emisividad de todos los metales.
Los modernos vidrios de baja emisividad de Guardian minimizan las pérdidas
energéticas, permitiendo así un mayor comfort y ahorro energético en el
interior del edificio, a la vez que reduciendo las emisiones de CO2
según las exigencias del Protocolo de Kioto. |